La historia nos ha demostrado una y otra vez que las empresas que adoptan las tecnologías emergentes obtienen una ventaja competitiva sobre las que no lo hacen. La ventaja competitiva de la digitalización en la fabricación es una historia tan antigua como el tiempo. En 1913, Henry Ford fue el primero en adoptar y aplicar a su fábrica el proceso automatizado de la cadena de montaje utilizado por la industria alimentaria. Al hacerlo, redujo su ritmo de producción de 12 horas a 2 horas y 30 minutos, y convirtió a Ford en un nombre muy conocido.
Por otro lado, la historia nos muestra que las empresas que no logran reestructurar sus procesos para mantener el ritmo de la innovación arriesgan sus resultados. Blockbuster Video se resistió al cambio y finalmente se encontró enterrada por el DVD puerta a puerta, y el eventual gigante del streaming, Netflix. La reticencia de la empresa a adaptar su modelo de negocio para seguir el ritmo de los sistemas de distribución de medios emergentes terminó con la organización presentando el Capítulo 11 con una deuda de 900 millones de dólares en 2010.
Hoy en día, avances como el Internet Industrial de las Cosas (IIoT) y la Industria 4.0 han traído al mundo de la fabricación smart machines que son capaces de una comunicación constante e intuitiva. Estamos realmente en la edge de una transformación de toda la industria a medida que el número de estos dispositivos sigue aumentando. Las organizaciones de fabricación que estén dispuestas a dar el salto y a aprovechar esta nueva computación cognitiva integrando sus sistemas de tecnología de la información (TI) y de tecnología operativa (TO ) se convertirán en las próximas historias de éxito de la industria.
La digitalización moderna en la manufactura no es diferente de lo que Ford hizo en el 1900.
Emulando a los molinos de harina y a las fábricas de conservas, cuyas líneas de montaje estaban estructuradas para la eficiencia y la producción rápida, fue capaz de liderar la industria del automóvil. Del mismo modo, los fabricantes que adopten la digitalización que tan bien ha servido a otras industrias serán los que lleguen a la cima.
En el sitio web ebook, The Power of On-Machine Intelligence, de Stratus Technologies y la Sociedad Internacional de Automatización (ISA), se afirma que “los fabricantes de máquinas que incorporen ordenadores de a bordo que apoyen la digitalización serán los proveedores preferidos.” Aquellos que automatizan para seguir el ritmo de las innovaciones que el IIoT y el Internet Industrial 4.0 están trayendo, serán finalmente buscados y valorados por su eficiencia.